Las 10 recetas para ser feliz


(Por Alejandro Jodorowsky)

¿Cómo podría definir en términos positivos la felicidad?
Ese concepto, abstracto hasta la medula, es imposible de ser descrito directamente. Para hacerlo tengo que dar un rodeo por su sombra.Vaya entonces la definición: "Felicidad es estar cada día menos angustiado".Para lo cual puedo intentar dar algunos consejos sin ser tachado de iluso.

1. Cuando dudes de actuar, siempre entre "hacer" y "no hacer" escoge hacer. Si te equivocas tendrás al menos la experiencia.

2. Escucha más a tu intuición que a tu razón. Las palabras forjan la realidad pero no la son.

3. Realiza algún sueño infantil. Por ejemplo: si querías jugar y te hicieron adulto antes de tiempo, ahorra unos 500 euros y ve a jugarlos a un casino hasta que los pierdas. Si ganas, sigue jugando. Si sigues ganando, aunque sean millones, sigue hasta que los pierdas. No se trata de ganar sino de jugar sin finalidad.


4. No hay alivio más grande que comenzar a ser lo que se es. Desde la infancia nos endilgan destinos ajenos. No estamos en el mundo para realizar los sueños de nuestros padres, sino los propios. Si eres cantante y no abogado como tu padre, abandona la carrera de leyes y graba tu disco.

5. Hoy mismo deja de criticar tu cuerpo. Acéptalo tal cual es sin preocuparte de la mirada ajena. No te aman porque eres bella. Eres bella porque te aman.

6. Una vez por semana, enseña gratis a los otros lo poco o mucho que sabes. Lo que les das, te lo das. Lo que no les das, te lo quitas.

7. Busca todos los días en el diario una noticia positiva. Es difícil encontrarla. Pero, en medio de los acontecimientos nefastos, siempre, de manera casi imperceptible, hay una. Que se descubrió una nueva raza de pájaros; que los cometas transportan vida; que un nene cayo desde un quinto piso sin dañarse; que la hija de un presidente intento suicidarse en el océano y fue salvada por un obrero del cual se enamoro y se casaron; que los jóvenes poetas chilenos bombardearon con 300.000 poemas, desde un helicóptero, a La Moneda, donde murió Allende, etc.

8. Si tus padres abusaron de ti cuando pequeño/a, confróntate calmadamente con ellos, en un lugar neutro que no sea su territorio, desarrollando cuatro aspectos: 'Esto es lo que me hicieron. Esto es lo que yo sentí. Esto es lo que por causa de aquello ahora sufro. Y esta es la reparación que pido'. El perdón sin reparación no sirve.

9. Aunque tengas una familia numerosa, otórgate un territorio personal donde nadie pueda entrar sin tu permiso.

10. Cesa de definirte: concédete todas las posibilidades de ser, cambia de caminos cuantas veces te sea necesario.

"Tu destino es las estrellas. No hagas un nido en la cama. Decide quebrar las anclas. Desaloja la escalera. No trasquiles, crea lana. Abre el ojo que no sueña. Pierde la carne y las venas. Deja desnuda a tu alma. Haz de tu nombre una hoguera y dile a tu cojo anda y dile a tu avaro ama
¡Corónate de una cresta!"

A. Jodorowsky

LOS DÍEZ TOROS DEL ZEN



1.Buscando el Toro.
Buscando al Toro

En el batallar de la existencia siempre hay un animal que nos acosa causando terribles perdidas y Sufrimiento pero llegado el momento uno no se resigna y enfrenta a la bestia - cuando el peregrino se da cuenta, que todo puede perderse y lo que hoy nos hace feliz mañana puede hacernos sufrir, y se disgusta con su tendencia a chocar con los mismos errores, se decide a emprender la búsqueda de la causa de su sufrimiento.

2.Descubriendo el Rastro.
Descubriendo el rastro

Empieza a descubrir las huellas del animal en el lodo y maleza (naturaleza de sus bajas pasiones y mucho de los impulsos que lo han condicionado, ha hundirse en terrenos cada vez más cenagosos, logrando pequeños momentos de placer acompañados de grandes periodos de dolor a sí mismo y a otros sintiendo vergüenza y arrepentimiento por sus actos), con lagrimas en sus ojos y su corazón hecho pedazos, solicita con su ultimas fuerzas ayuda, pero a parecer nadie lo escucha.

3.Primer vislumbre del Toro.
Primer vislumbre del toro

Después de días y noches de vela habiendo agotado sus lágrimas, serenada su mente, una voz irrumpe su silencio y le dice: “Ese no soy Yo, solo el pensador puede ayudarte a empuñar las armas que te darán la victoria”, y aunque no sabe de donde vino esta voz confía en su dictamen y descubre que hasta ese momento no se había valido de su mejor aliado, la mente que hasta entonces había estado silente ante los gritos y gemidos de sus terrenas pasiones.

4.Capturando el Toro.
Capturando al toro

Emprende la lucha desplegando fuerzas mentales y valiéndose de la espada del discernimiento cortando una por una las malas y espinosas yerbas (Maya: apegos, ilusiones falsas, y espejismos) que tratan de impedir su avance sangrando sus pies en la difícil batalla, pero con fe firme en la victoria y en su misterioso consejero; entonces lanza su lazo capturando al Toro (su naturaleza inferior) aunque este se resiste a ser frenada en el mástil (los pensamientos determinados a no ceder más).

5.Domando el Toro.
Domando al toro

El Toro ( las emociones ) hala duro el mástil (los pensamientos), que es removido, pero el valiente guerrero lo vuelve a enderezar . Entonces el Toro reconoce que la batalla esta perdida y se rinde a los pies del domador.

6.Cabalgando en el Toro a casa.
Cabalgando el toro a casa

El peregrino logra amansar al Toro y victorioso cabalga en su lomo, el Toro (anteriormente salvaje) se convierte en su amigo (esto quiere decir que: sus emociones redimidas solo se enfocan en actos de bondad y devoción difundiendo la parte externa del Dharma consagrado al ideal a que se encamina “La Realización Espiritual”).

7.Olvidar el Toro, quedándose consigo mismo.
Olvidar al toro, quedandose consigo mismo

Deja por fin al toro libre ya es un animal manso (en esta etapa, se da cuenta que aun sus más elevadas aspiraciones son una limitación ya que ha transferido el deseo de las cosas materiales por la aspiración de facultades espirituales, que aunque más elevados no dejan de ser un obstáculo para el avance).

8. Olvidar al Toro y a uno mismo.
Olvidar al toro y uno mismo

¿Que hacer ahora?¿Cuál es mi próximo paso? Sus armas ya no le sirven, se queda solo se pierde así mismo (el peregrino olvida sus más ardientes aspiraciones y se enfoca en su mente preguntándose a toda hora ¿Quién soy Yo?, ¿Quién recita el nombre del Buda?); y así surge miles de forma de cuestionamientos hasta que como el guerrero que ya no tiene nada con que luchar suelta sus armas (abandona sus pensamientos y mente) que ya nada le pueden aportar.

9.Retornando a la fuente.
Regresar a la fuente

En este instante desarmado y desnudo se abre delante la puerta, él es la puerta, él es el camino y viéndose rodeado de luz, sin velo ni cuerpo vuelve la voz (la voz insonora y a la vez audible) que es el mismo y se dice “Yo Soy ese, ese Yo soy”, “Soy Nada y estoy en Todo”, “Y no teniendo Nada lo puedo dar Todo”,. En ese instante viene la gran elección: 'Tomar la vestidura Dharmakaya o Convertirse en un Nirmanakaya', y rendido por el más sublime Amor que está oculto en el misterio de la Unidad, levanta su oído y ojo dévico escuchando y viendo todo ser que batalla en las marejadas y vueltas de la Rueda Samsárica, su corazón se expande de compasión por las miríadas de seres que no conocen la realidad guardando todas sus lagrimas en su más profundo seno.

10.Entrando al Mercado con las manos dadivosas.
El mundo.

Renuncia a los más elevados estados de paz convirtiendo todo dolor en suyo, cantan los Devas y hasta los más elevados Jerarcas celebran su paso ¡Ha nacido un salvador!, ¡Ha florecido un loto!, ¡Ha nacido un Buda! Descendiendo a la materia para ayudar a todo el que pueda alcanzar y tomando el camino del Bodhisattva comienza su labor hasta que el último de los Seres alcance la liberación.



Fin